Con Drones o sensores de campo podemos monitorear cultivos, con la finalidad de prevenir deficiencias, plagas o enfermedades antes de que la planta manifiesta un problema.
El Dron multiespectral puede mapear una gran superficie en un vuelo (más de 100 hectáreas). Después de volar se procesa, para analizar las zonas criticas, que pudieran representar problemas en el cultivo.
Los Sensores activos permiten hacer analis multiespectral en tiempo real al realizar alguna otra labor dentro del campo, o pueden usarse a la par con un sistema de control para ir haciendo fertilización variable en tiempo real.